Escucharlos hablar es siempre una maravilla, aunque más es escucharlos cantar. Después de una década sobre los escenarios, los madrileños Club del Río vuelve a escena con un álbum precioso como es «Todo alrededor». Un disco que vio la luz el pasado viernes 5 de abril y con el que girarán por toda España, siendo el pasado 7 de marzo su primer directo en Barcelona. Precisamente, a raíz de esta visita a la Ciudad Condal, charlamos largo y tendido con Esteban de Bergia (voz y guitarra) y Juan Serra (voz, batería y percusiones). Esto es lo que nos contaron.
Aprovechando que «Todo alrededor» ya está en la calle, lo primero que me gustaría preguntaros es, ¿cómo nace y cómo surge todo el concepto alrededor del disco?
Esteban. ¿Cómo nace?
Juan. Pues en tu habitación, como de costumbre [risas].
Esteban. Sí, bueno, como suele ser habitual, nace de lo más íntimo. Las canciones van apareciendo poco a poco y de manera muy natural. Realmente, lo que hacemos Club del Río, y sin quitarnos méritos, es una recopilación de temas que han surgido en cierta época, las unimos, les damos forma y las grabamos en el mismo sitio. Entonces van adquiriendo el mismo tinte, la misma forma.
Juan. Y a partir de ahí, ya surge el concepto en sí. No es que lo busquemos antes y empezamos a componer en torno a eso. Si no que las canciones en sí son las que mandan, por así decirlo. Son las que van llevando el rumbo.
Esteban. En sí, creo que la pregunta es, ¿por qué la música nace en alguien? [risas]. Es una cuestión casi filosófica, que tiene que ver con el arte, con lo que sana. Cuando alguien hace cualquier tipo de creatividad, es como medicina, es sanador psicológicamente, puede ayudarte a entender el mundo. Lo bueno, es que nosotros hacemos mucho caso a esos impulsos.
Comentáis que los discos de Club del Río nacen en momentos clave de la banda. ¿En qué momento os encontráis ahora con «Todo alrededor»?
E. Pues como estamos ahora. Que estamos haciéndonos mayores [risas].
J. Después de «Lejos contigo», que vino un poco con todo el mazazo del COVID y que, además, fue un disco mucho más paisajista y más de girarlo en teatros, había ganas de baile y de sudar de nuevo en el escenario. A Esteban también le ha apetecido pasarse a la guitarra eléctrica. Creo que hay más estribillos que nunca en un álbum de Club del Río. Hay ganas de salir, de disfrutar, de trabajar, de conectar con la gente.
E. Sí, de hecho, concebimos los directos muy enérgicos y como un espacio en el que la gente pueda cantar. Con respecto a lo de los estribillos, totalmente cierto, no lo había pensado. Pero sí que es verdad que nosotros siempre hemos pecado de decir que no seguiremos esa fórmula, pero de repente, es que en este disco han surgido varios estribillos cantables, que se repiten en la canción. Nosotros estamos alrededor de los 33 años, creo que nos hacía falta esa crisis. Bueno, no lo llamaría crisis, más bien revelación de vida. De repente, te planteas muchas cosas, tienes familia y, de alguna manera, empiezas a hacerte mayor. Es un momento clave en el que te planteas cómo meterle un bálsamo a este lugar.
J. La palabra crisis también tiene una connotación positiva. Comparte raíz con crisálida y es sinónimo de oportunidad. Tocar fondo, te da nuevas oportunidades y puede significar un cambio de era.
E. Sí, sí, totalmente. Así que sí, en medio de este cambio de era, hemos dicho: «vamos a hacer un disco enérgico, que nos eche una mano a estar de manera activa y vital».
Este «Todo alrededor» tiene este punto vitalista y hace mucho honor a las raíces y al salto de generación. Además, como bien mencionáis, las canciones se han dado de manera muy natural, pero ¿cuáles han sido las principales influencias a la hora de darle vida al álbum?
E. Es que es un misterio eso, ¿sabes? El cómo se produce. A nivel composición, sí que creo que he dado un paso, al tener estudio en casa. Entonces sí que eso habrá influido en el proceso de escritura. Además, sí que es verdad que ahora soy capaz de ver las canciones más desde fuera, desde otra perspectiva. Ahora sí que las pongo en el programa de edición, las cambio de orden, modifico las partes. Les doy más juego y creo que eso le ha dado un sonido específico a «Todo alrededor».
J. Tenemos otro punto de inicio. Antes partíamos de tu guitarra y tu voz [refiriéndose a Esteban]. Ahora sí que nos propones ideas de voces, que nos han ayudado un montón a Álvaro y a mí, ideas de arreglos y de sintetizadores, cosas que no habíamos pensado hasta la fecha. Así que sí, todo eso ha contribuido mucho.
E. En el fondo, para adornar las canciones, es necesario tomarse en serio la creatividad de la que hablábamos al principio, ponerle un lugar muy importante en la vida. De hecho, llamarlo creatividad es quedarse corto, porque este proceso abarca mucho más en la vida de una persona. Así que es darle cabida, entender que cada mierda que sale es buenísima [risas]. Porque no hay juicios y hay que confiar en uno mismo.
Aunque habéis trabajado mucho las canciones en casa, Brian Hunt os ha acompañado mucho en el proceso de producción. ¿Cómo ha sido trabajar con él?
J. Hasta la fecha, creo que Brian ha sido el productor que más se ha incluido en el proceso y nos ha probado a todos. De hecho, a Pezzi, el guitarrista solista, lo ha ayudado mucho a ir más allá, a buscar distintos sonidos y dimensiones con su instrumento. Con nosotros también, a nivel voces y armonías. Incluso grabó alguna voz él. La experiencia ha sido buenísima. Además, tiene el tipo de estudio que nos gusta a nosotros: un estudio residencial, en el que vamos a vivir durante una semana o diez días. Es lo que más nos funciona, porque hacemos campamento, hacemos piña y convivimos. Es algo que después se nota en las canciones, porque todas las vivencias compartidas, hacen poso.
E. De repente, puedes estar desarrollando una idea por la noche, cuando Brian ya se ha ido a su casa, y sobre algo que has grabado por la mañana. Como que todo el rato estás en pleno proceso de creación, de elaboración de ese álbum. Aunque estés cocinando unos filetes. Todo está y todo forma parte del álbum. Nosotros lo hemos experimentado muchas veces, grabando de esta manera. La única vez que no lo hicimos fue con el primer álbum, porque no sabíamos nada y éramos unos chavalines. Y luego, durante la pandemia, que en este momento, tampoco pudimos estar todos juntos grabando, porque era difícil desplazarse y viajar, así que también lo grabamos en Madrid.
J. En el caso de «Sustancia» y de «Un sol dentro», los hicimos con Raúl Pérez en La Mina de Sevilla, y los hicimos también siguiendo este concepto de compartir y de convivir.
E. En definitiva, Brian ha hecho un trabajo muy bueno. Hay muchas maneras de trabajar en la música y de grabar un disco. Puede ser que el proceso de grabación y producción sea muy abierto. O puedes ir a un estudio donde tengas los medios necesarios para grabarte tú. Y Brian ha sabido meterse mucho en ambos mundos, sin invadir mucho ni por un lado, ni por el otro. Ha sabido estar y nos ha entendido. De hecho, probado está: el disco lleva su sello en muchas cosas. Su manera de tocar y de entender la música están ahí.
Hay otra cosa que me gustaría preguntar y que, creo, que se ha visto muy clara en los tres adelantos que pudimos escuchar («Una vida», «Cuida a tu madre» y «Mística voraz»). Y es que el arte está cuidado, tanto los videoclips como los propios diseños. ¿Cómo surge todo este concepto?
E. ¿Cómo surge todo alrededor, no? De verdad que, desde que hemos puesto al disco el título de «Todo alrededor», no dejo de escuchar esa frase en todos lados [risas]. Con respecto a toda esta parte visual… la verdad es que, desde el inicio, siempre ha sido un aspecto importante para nosotros. Siempre nos hemos sabido rodear de personas expertas y muy buenas en todas estas áreas. Personas de confianza, que han entendido nuestro concepto y en las que hemos puesto fe ciega para todo. Tanto a la hora de hacer los videoclips, como a la hora de hacer el arte en general.
J. También nos gusta implicarnos en todo este proceso. De hecho, el videoclip de «Cuida a tu madre» lo hicimos nosotros mismos, de manera muy casera. Y el de «Mística voraz» ha sido el primero que hemos guionizado desde Club del Río.
Este año, celebráis una década como banda. ¿Cómo lo estáis viviendo y qué le diríais a los Club del Río que empezaron con el proyecto?
J. Pues está siendo bonito porque, en su momento, la banda nació por pasión y por amor a la música. Club del Río surgió por pura motivación personal, pero después de todos estos años, se ha transformado y se ha profesionalizado.
E. Además, llevamos diez años como banda y dando visibilidad al proyecto. Pero, en realidad, nosotros llevamos mucho más tiempo dedicándonos a la música, ya que hemos tenido experiencia en otras formaciones. Así que, verdaderamente, llevamos unos quince años.
J. Respecto a qué nos diríamos cuando comenzamos con Club del Río… Sin duda, sería un: «confiad y seguid».
También aprovechar para preguntaros, ¿qué podremos ver en los conciertos de esta gira?
E. Los directos de esta gira serán enérgicos, tal cual ha surgido «Todo alrededor». Queremos que la gente cante, baile y disfrute. Además, aprovecharemos la celebración del décimo aniversario de Club del Río, para tocar canciones que hace mucho tiempo que no suenan en vivo. En todo caso, van a ir muy en sintonía con nosotros mismos y con cómo nos sentimos ahora.
Quedan dos preguntas por hacer, que son con las que me gusta finalizar. La primera de ellas es, ¿qué canción propia identifica mejor el momento en el que estáis y por qué?
J. Yo me quedaría con «Cuida a tu madre».
E. Pues para mí, la canción sería «Somos raros». De hecho, las dos que hemos elegido son de «Todo alrededor» que, al final, es el trabajo que más nos identifica. ¿Cómo no va a ser el que más nos define si es el último que hemos publicado? Estamos mucho con el mood de este álbum.
Por último y también por hacer honor al nombre de la revista, ¿cuál es la verdadera locura que habéis cometido por la música?
E. A ver qué podemos contar. [Risas]. Yo diría que dejarlo todo por la música. Pero sin entrar demasiado en detalles. [Risas].
J. Sí que es cierto que hemos hecho muchas locuras por tocar y hacer conciertos. Especialmente, ha habido muchos kilómetros y viajes, muchos fuera de España. De hecho, hubo una vez que tocamos en Reino Unido y justo después de actuar, la banda se volvió a casa, pero nosotros dos [refiriéndose a Esteban y a él] nos quedamos unos días más allí. Fue una experiencia que recuerdo con cariño.
Pues sin entrar demasiado en detalles: bendita locura que nos ha traído hoy aquí [risas]. ¡Muchas gracias por la entrevista!
Ambos. La verdad es que sí, bendita locura. ¡Muchas gracias!