Hay ocasiones en las que música e imagen van de la mano, dos elementos que no se entienden el uno sin el otro. Hay ocasiones en las que el concepto artístico es capaz de traspasar la pantalla hasta rozarnos el alma y el corazón. The Gabor sabe a lo que nos referimos, porque lleva tiempo regalándonos su música a modo de capítulos. Una historia que solo se entiende en su totalidad pero que, por separado, supone de por sí una joya tan maravillosa como el recién estrenado «capítulo 8: el ciervo».
Un nuevo tema que tiene como base la invasión a los animales y su espacio vital. Una pequeña visita al pasado, en ese periodo de cuarentena, en el que los animales salvajes se hicieron con las zonas pobladas, mientras los humanos los veíamos desde el balcón. Intimidados por su presencia fuimos capaces de ver cómo la naturaleza cogía terreno. Y por continuar con ese carácter salvaje que tiene la letra, no nos podemos olvidar de la melodía, compuesta en un 12×8 con base de la bulería en flamenco. Pero The Gabor da un paso al frente en este sentido y lo impregna todo de su ya identificable indie rock alternativo. Unas influencias que vuelan libres entre el folk tradicional y la electrónica más vanguardista. De la música de los 70-80 al indie en español más actual.
Con «capítulo 8: el ciervo», The Gabor da un paso al frente y nos acerca un poco más al que será su primer álbum conceptual, «La invasión de los humanos». Nueve canciones o nueve invasiones humanas hechas canción, convertidas en arte, transformadas en música. Todas y cada una de estas composiciones, llegarán acompañadas de nueve videoclips que darán empaque a la propia música, que darán otra perspectiva a las melodías. Además de impregnar todas y cada una de las canciones con una fuerte conciencia de clase y una clara preocupación por los animales.