¿Qué puede pasar cuando cuatro de los artistas chilenos más prometedores de su país aúnan fuerzas y deciden cruzar el océano hasta Andalucía? Una enorme locura encabezada y liderada por Sebastián Orellana, músico y gran conocedor de todos los movimientos musicales del underground a ambos lados del Atlántico, que tendrá cinco fechas por diferentes ciudades y escenarios del territorio andaluz. Cerrando filas con él, encontramos a los también increíbles Martín Benavides y Matiah Chinaski, ambos fundadores del proyecto Salvaje Nostalgia, y al productor DJ Pérez. Una formación de escándalo y puntual, que ha nacido con el único propósito de traspasar fronteras y trasladar el enorme talento musical de Chile a nuevos lugares por descubrir.

Un cuarteto de formidables y singulares músicos chilenos que, con diferente origen, convergen en un singular proyecto durante la última semana de mayo. Un proyecto en el que explorarán sus diferentes estilos, procedencias y personalidades, prometiendo un ecléctico espectáculo que recorrerá las ciudades y los escenarios del Gallo Rojo de Sevilla (25 de mayo), La Mecánica de Jaén (26 de mayo), Planta Baja de Granada (28 de mayo) y el Café Vagomundo de Benalúa (29 de mayo). Las entradas para estas citas ineludibles, ya se encuentran a la venta.
Pero más allá de estas inesperadas citas, ¿quién es quién en esta efímera banda musical? Sebastián Orellana lleva residiendo en Andalucía desde hace algunos años, cuando llegó con su banda La BIG Rabia. Incansable en su constante búsqueda de nuevos proyectos que den cobijo a todas sus ideas e inquietudes musicales, sorprendió a todos en 2020 con el sensacional LP, «Dios Perro». Por su parte, Martín Benavides y Matiah Chinaski forman una potente e inquebrantable alianza en Salvaje Nostalgia, proyecto al que dan vida. Proyecto en el que aúnan música blues, rap, experimentación y poesía, mucha poesía. Poniendo el broche de oro, encontramos a DJ Pérez, músic natural de Santiago de Chile especializado en mezclar experimentar jazz y hip hop con la tornamesa, una extensión natural de su figura. Un combo de escándalo que en directo tiene que ser una auténtica bomba de relojería.