«Changes» será el álbum debut de la joven cantautora Paula Ferraz. Septiembre llegará cargado de novedades para ella, aunque ya está empezando a hacer ruido. Su primer single, «Say Goodbye» ya está en la calle. Y es el pequeño avance del disco, ya grabado en Molinillo Récords. ¿Con qué buenas nuevas nos sorprenderá la malagueña?
¿En qué momento empieza Paula Ferraz a dedicarse a la música?
Bueno, es una historia que viene de largo. Yo estudié piano en el conservatorio durante diez años, y cuando tenía once, decidí experimentar con una guitarra que tenía mi madre en casa. Poco a poco, fui adaptando lo que sabía de lenguaje musical al nuevo instrumento, versionando las canciones que me gustaban. Más tarde unos amigos y yo montamos un grupo, The Nameless, para tocar de vez en cuando, y compusimos algunas canciones. Yo cantaba y después también cogí el bajo. Cuando ellos se fueron de Marbella para estudiar, yo decidí seguir tocando mis versiones con la guitarra. Ahí «nació» Paula Ferraz. Di varios conciertos en un bar llamado Saltaluna y antes de mudarme a Madrid compuse mi primera canción.
¿Y cuándo decides dedicarte profesionalmente a ello?
Realmente aún no sé si conseguiré hacer de esto mi profesión, pero sí que tengo claro que me gustaría. Por ahora no me dedico por completo a ello, voy poco a poco. Si tengo que pensar en un momento concreto en el que decidiese seguir con el proyecto, creo que sería tras el concierto que dio Carmen Boza en Madrid, en octubre de 2016. Yo acababa de descubrirla y de comprarme el disco. En ese momento, me di cuenta de lo que me gustaría llegar ahí. No tengo prisa, voy pasito a pasito, pero sí que me hago una idea de dónde quiero llegar.
¿Cómo surge el concepto de «Changes»?
Podría decirse que «Changes» es un viaje a través de los cambios que he ido experimentando en algo menos de tres años. Todo empieza antes de irme de Marbella, con «Say Goodbye» y acaba con «Changes», cuando mirando atrás me doy cuenta de lo diferente que soy respecto a ese momento. Las canciones hablan de lo que me ha pasado en ese tiempo: tomar una decisión importante, la desorientación de un lugar nuevo, la nostalgia, personas que se han ido de mi vida o han entrado en ella.
¿Por qué apostar por el crowdfunding?
Lo que más me gusta del crowdfunding es la sensación de propiedad colectiva del proyecto que después ve la luz. Cuando salga «Changes» no será solo mío, sino también de cada mecenas que colaboró y que lo hizo posible. Yo he participado en varias campañas de crowdfunding, y al final sientes un cariño especial por ese disco u obra de cualquier tipo. Me gusta pensar que la gente sentirá eso con mi trabajo.
Por otra parte, es una oportunidad para quienes de otra forma no podríamos sacar adelante algo como un disco. Si yo hubiese querido sacar «Changes» adelante sola, habría tenido que esperar y seguramente solo habría salido en digital.
¿Cómo ha funcionado?, ¿volverías a recurrir a ello?
Ha sido una experiencia increíble. La gente se ilusionó mucho con el proyecto, y recibir tanto cariño fue muy bonito. Desde Verkami también lo hacen todo más fácil, y resultó ser todo menos estresante de lo que pensaba. Llegamos al primer objetivo cuando aún quedaba la mitad del tiempo de campaña, y recuerdo pensar decirme a mí misma «Vale, esto va en serio. Vas a editar un disco que la gente va a tener en sus manos». Muchas personas me han dicho que les hace especial ilusión apoyar arte emergente, y eso me parecen muy buenas noticias. Al final sientes que tienes un público, que esto no lo haces para ti, sino para esa gente que ha decidido que vale la pena participar. Sin duda, si no pudiese costearlo por mi cuenta, volvería a recurrir al crowdfunding para financiar proyectos futuros.
¿Cómo ha sido grabar en Molinillo Records?
La grabación ha sido genial, fue un lujo contar con Álvaro y Virginia. Ya había grabado «Say Goodbye» allí, en junio del año pasado, y tenía claro que no quería contar con nadie más. Fue como estar en casa, sin ninguna presión y cómoda en todo momento. Además, me hizo muchísima ilusión grabar precisamente con ellos, porque precisamente son unas de las personas que entraron en mi vida por casualidad, cuando me encontré en las redes su campaña de crowdfunding para el disco «Bendita Valentía» de Duerme Simón. Quién me iba a decir cuando entré en su campaña que acabarían siendo quienes harían posible «Changes».
En octubre de 2017, vio la luz «Say Goodbye». ¿Cómo ha sido la acogida de este tema?
Tenía la canción desde verano, pero decidí esperar para sacarla. En ese momento estaba en Praga de Erasmus, así que no pude recibir en persona el feedback de la gente que me solía escuchar. La acogida fue muy bien, poco a poco veía que la gente lo escuchaba, y gustó mucho. Fue mi carta de presentación, un «hola, estoy aquí» que salió bastante bien.
¿Cómo surge la canción y por qué escogerla como single?
«Say Goodbye» fue la primera canción que escribí yo sola, ya como Paula Ferraz. La escribí en marzo de 2015, pensando en que en septiembre de ese año me mudaba a Madrid. Mucha gente pensaba que era una canción de amor, pero en realidad se la dediqué inicialmente a mis padres, y a todo lo que dejaba atrás. Fue la primera canción que la gente cantó parcialmente conmigo en un concierto, y es muy especial para mí. Por eso, cuando decidí grabar una canción como single, no dudé en que fuese «Say Goodbye».
El disco es especial, ya que irá acompañado de un «cuaderno de viaje». ¿De qué se trata y por qué decidiste incluirlo?
De ese concepto de recorrido que tiene «Changes», surgió también la idea de hacer ese cuaderno de viaje como libreto del disco, en el que además de las letras de las canciones decidí incluir ilustraciones, fotografías y textos de personas que me han acompañado de una forma u otra en el viaje. Será como una pequeña exposición de arte relacionado con las canciones. Me pareció que era una forma original de contar la historia detrás de las canciones, de hacer algo interesante al margen de lo que es el disco. Cuando la gente lo abra, estarán leyendo una especie de diario, con recortes, ideas, pensamientos.
Además este libreto contará con colaboraciones especiales. ¿Alguna que se pueda avanzar?
Sí, las colaboraciones serán de todo tipo y de personas a las que quería dar un espacio para mostrar lo que hacen. Como digo, habrá textos, ilustraciones y fotografías que siempre guardarán cierta relación con el mensaje de «Changes». Puedo adelantar alguna, sí. Entre las fotografías habrá algunas de Irene Garmtz, que además de ser una gran artista audiovisual me acompaña a veces en el escenario con el violín; y encontraréis algún texto de Ana Oniria, quien me descubrió los micros abiertos y sin la que esto no habría pasado.
A partir de este momento, ¿cuáles son los siguientes pasos de Paula Ferraz?
A corto plazo, me queda bastante trabajo por delante: hay que editar el disco y los cuadernos de viaje, preparar las recompensas, planear la promoción, entregar las recompensas. Tengo muchas ganas de poder compartir el resultado, y de saber qué le parece al mundo. Como fechas concretas, el 1 de septiembre saldrá «Changes», y el 29 será el concierto de presentación en Madrid. A partir de ahí, es cuestión de ver qué pasa y dónde me lleva todo esto.
¿Qué es lo más loco que has hecho por la música?
Hace dos años, participé junto a Elina Masalin y Ken Daniels en un proyecto de música clásica experimental, en el que adaptamos obras clásicas mezclándolas con otros estilos, con flauta travesera, piano y bajo eléctrico. Los ensayos eran cerca de La Latina, y yo traía mi teclado desde Getafe en un pequeño monopatín. La cara de la gente que me veía llevando el instrumento, me confirmaba que era algo bastante extraño. Creo que es lo más loco que he hecho por la música, por ahora.